La existencia de los espiritus de la naturaleza.

Quiero hacer mi primera entrada a mi nuevo blog hablando de estos seres "fantasiosos". Lo pongo entre comillas porque para un humilde servidor como soy, creo en ellos. Para los que sean duros de mollera o poco abiertos de mente, abstengansen de seguir leyendo. Para todos los demás, espero que les guste:

El mundo se rige por energías, todo se crea o se cambia mediante energía. Cualquier nimiedad la utiliza. Pero claro, como todo en la vida, hay cosas buenas y cosas malas. En este caso hablamos de energias positivas (benignas) y energias negativas (malignas). Las personas mientras vivimos creamos energía y a veces también la captamos. Una persona que es mala, genera energía maligna, esa energía si es captada por una persona que es mentalmente débil puede hacer que ésta obtenga cosas malas, bien dolores, bien mala suerte, etc. Es lo que comúnmente denominamos "una persona gafe". Puesto que la energía no se puede destruir, solo transformarse, la energía vital de una persona no desaparece con su muerte, sino que sigue "viva". Estas formas de "vida" es lo que denominamos espíritus.

Bien, una vez dada una pequeña lección de las energías vitales y los espíritus. Voy a habla de los espíritus de la naturaleza, los que se encargan de cuidar las cosas de la naturaleza como los ríos, los bosques, los desiertos...

En seguida se nos vienen a la cabeza millones de cuentos infantiles donde aparecen hadas, duendes o ninfas. Pero qué tiene de realidad estas cosas? Cómo puede ser que en todos los vestigios de humanidad antigua se hablen de ellos? Desde la mitologia griega, nórdica  hasta la Edad Media se hace mención a estos seres. Y yo me hago la siguiente pregunta: ¿Acaso para que alguien empezara a hablar de estos personajes, no hubo un principio en el que alguien los vio? Me explico, acaso no se demostró que el vampirismo no era en realidad a causa de la enfermedad llamada porfiria? Esta es una horrible enfermedad que causa fotosensibilidad en la piel, es decir, que no aguantan la luz solar, le produce alteraciones en la piel.
Bien, corrieron millones de especulaciones en su época por estas personas enfermas que no podian ver la luz del Sol. Y una vez fallecidos y enterrados eran profanados de sus tumbas para ver su estado y vieron que sus pelos y uñas "habian seguido" creciendo. Y sus colmillos estaban alargados. La explicación a todo esto es la siguiente: Cuando mueres y empiezas a pudrirte, la primera carne que empieza a "encojer" son la de la cabeza, dedos y labios. El efecto que se produce es que parece que el cabello y las uñas han crecido, cuando en realidad lo que ha decrecido ha sido lo que lo rodean. Con los comillos ocurre lo mismo, al contraerse los labios y las encias, se deja ver los dientes como más largos y agresivos. Bien imaginaos esta escena en personas que creían maldito a los muertos que acababan de deseterrar, unos pobres enfermos a los que acusaban de ser el problema de sus desgracias. 

Pues a lo que iba, si alguien vio a estas personas en este estado, no cabe lugar en qué maravillosas historias imaginadas que se inventó. Bien, qué tendría que haber visto la primera o primeras personas que vieron a uno de los espíritus de la naturaleza. Para crear, aunque no lo parezca, hace falta imaginar, y para imaginar hace falta ver algo.

Qué es lo que vieron? Lo sabrás en las proximas entradas...